Selim Özdogan - Mehr
La imagen de la mujer en esta obra
En primer lugar conviene señalar que son fundamentalmente dos las mujeres retratadas en esta obra, Anika y Filiz, ambas vinculadas entre sí por su relación con el yo narrativo, pese a no tener contacto entre sí. En este sentido, son dos mujeres antagónicas, bien por proceder de entornos culturales diferentes, bien por pugnar – sin saberlo – por el mismo varón. De este modo, se cabe mencionar a Anika, la novia alemana oficial, y a Filiz, la mujer turca con la que el protagonista mantiene una relación paralela.
A continuación, ha de hacerse referencia al tipo de fotografía presentada por el novelista, que se asemeja más a un cuadro cubista que al retrato fiel. Esta afirmación se basa en que la imagen de estas mujeres se corresponde más con la idea que el narrador tiene de ellas que con las figuras reales de las mismas, ya que las personas femeninas en esta obra se contemplan como carentes de vida propia, pues el lector es en todo momento consciente de contemplar personajes a través del filtro fotográfico del autor.
A propósito de esto, se advierte que la intervención de las féminas en la novela Mehr se halla estrechamente relacionada con la propia actuación del protagonista, convirtiéndolas en complemento de éste con función ya sea de espejo que refleja la actuación del yo narrativo, ya sea de refugio en el que éste se siente seguro.
En cuanto a la figura de Anika, el lector dispone de gran número de datos: es alemana, sus padres viven y su madre tiene que someterse a una operación de cáncer; su hermana defiende la alimentación vegetariana y macrobiótica; durante la adolescencia pasó por un período difícil debido a la anosmia que padeció; desempeña un trabajo poco frecuente entre la población femenina, ya que es pintora (de brocha gorda); asimismo, se intuye por la forma como reacciona ante la aventura de Ian que es una gran amante de la verdad, capaz de perdonar un desliz, pero intransigente con la mentira.
Sin embargo, a pesar de todas estas referencias, el personaje de Anika no logra hablar en ningún momento en nombre propio, ya que queda relegado a mero instrumento, cuyo objeto consiste en facilitar al narrador el acceso a una esfera protegida.
Esta esfera consiste en una entelequia que otorga seguridad al narrador omnisciente por medio de un universo en el que todo es perfecto y al que Ian se evade en busca de descanso, huyendo de la realidad circundante.
Precisamente, esa paz la alcanza el protagonista a través del acto sexual, como él mismo explica:
“Anika setzte sich auf meinen Bauch und fing an, sachte meine Brust zu streicheln, langsam, gleichmäβig, bis ich ein wenig eingelullt war, dann beugte sie sich runter, saugte an meinen Brustwarzen, machte mich geil. [...] Anika stieβ mich in eine andere Welt, die Welt des Sex, wo alles in Ordnung war seit Anbeginn der Zeit. Wo es nicht darum ging seine Gelüste zu befriedigen, sondern sich in einer Unendlichkeit nicht verloren vorzukommen. [...]
Als ich langsam zurückkehrte aus diesem weiten Land, ... diese Geborgenheit, ...“ (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p.33)
Este párrafo identifica el sexo como vía de escape. Por consiguiente, la relación de Ian con Anika no se basa tanto en lazos afectivos como en la necesidad imperiosa del primero por tener un lugar que le dé la sensación de solidez y estabilidad. De ahí que puedan ser interpretadas las figuras femeninas en general y la de Anika en particular como instrumentos que permiten al protagonista alcanzar ese objetivo. En este sentido, Anika es, por un lado, el regazo donde el protagonista descansa y, por otro, el reflejo de la actuación del mismo: un personaje que ante todo busca la satisfacción de sus necesidades primarias.
Consecuentemente, cuando menciono arriba que las mujeres aquí retratadas carecen de vida propia me apoyo primordialmente en la descripción que el novelista presenta de éstas como objetos sexuales. De esta manera, se observa la recurrente alusión del yo narrativo a sus necesidades sexuales. Así ocurre en el pasaje del capítulo 2, donde el narrador se encuentra en el avión de vuelta a Alemania y piensa en Anika:
“… und dachte an Anika. […]
Fast drei Wochen war es her, daβ wir das letzte Mal gebumst hatten. […]
Ich phantasierte, daβ wir uns vor lauter Ungeduld für die Flughafentoilette entscheiden würden. Ich stellte mir vor, wie ich hastig meine Hose aufknöpfte, nachdem die Haustür ins Schloβ gefallen war, daβ Anika keine Slip anhaben würde oder nur diesen durchsichtigen.”(Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p.14)
Llama la atención la índole de los sentimientos que afloran en este fragmento, exclusivamente de índole sexual, pues el narrador, pone de manifiesto de forma reiterada que añora a Anika por la contención sexual que ha experimentado. La importancia del acto sexual alcanza niveles tales que el novelista reitera a lo largo de siete páginas (desde la pp. 14 a la 20 inclusive) su fijación sexual.
Es en este sentido que cabe afirmar que la figura de Anika carece de unos contornos claramente definidos, porque, tal y como se ve en el capítulo relacionado con el tema del país de procedencia, el protagonista busca en las personas que trata en Alemania un placebo de hogar. De este modo, se aprecia que Anika es para él un punto de reposo, donde puede relajarse, puesto que el sexo practicado con ella le permite evadirse de la realidad circundante y adentrarse en un universo cerrado, protegido y perfecto.
A propósito del otro personaje femenino, el autor ofrece menor cantidad de datos en comparación con las referencias de Anika. Ahora bien, se sabe que es de origen turco y parece probable su pertenencia a la segunda generación de inmigrantes.
Esta hipótesis se fundamenta en la circunstancia de no cumplir esta figura con el estereotipo reinante en Occidente sobre la conducta de las mujeres musulmanas, como se observa por el modo en el que se conocen ella y el narrador, ya que es ella la que le aborda:
“Eine Frau mit einer Flasche Bier in der Hand stellte sich neben mich.
- Ich habe deine Bücher gelesen. Sehr schön, muβ ich sagen, haben mir gut gefallen.”(Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, P. 64)
Lo inusual de esta conducta llama la atención del protagonista y por ende la del lector, cuando lee la afirmación del primero:
“Zuerst wuβte ich nichts zu sagen, es passierte nicht alle Tage, daβ mich jemand so ansprach.”(Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, P. 64)
Una vez hecha esta presentación, Ian la describe como una mujer mediterránea, de ojos oscuros, cuya nariz tiene una ligerísima protuberancia, pelo largo y negro, piel oscura y exenta de arrugas así como pechos grandes:
“… Ich betrachtete sie genauer, eine Südländerin, dunkle Augen, einen winzigen Höcker auf der Nase, lange schwarze Haare, eine dunkle, weiche und sehr glatte Haut und groβe Brüste.”(Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, P. 65)
A raíz de este encuentro coincide con cierta asiduidad en el ’Nick’, una especie de disco-pub, donde charlan y bailan, surgiendo, de este modo, una relación de amistad, en la que el yo narrativo se siente cómodo, dados los numerosos puntos comunes que existen entre ellos; cabe destacar entre estas coincidencias la lengua turca y las costumbres de este país que les son familiares.
Ello les permite compartir una lengua propia entretejida de palabras alemanas y turcas a la par que no necesitan explicarse determinadas acciones arraigadas en la tradición turca, como verter agua cuando uno se marcha (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, P. 137) deseándole así buen viaje. Son pequeños detalles que hacen que el protagonista se sienta complacido y a gusto cuando está con ella:
“Vielleicht hatte ich deshalb soviel für sie übrig, weil wir eine so schöne Nacht erlebt hatten, zusammen ungezwungen und frei gewesen waren.“(Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, P.68)
Conviene destacar que, en un primer momento, la relación entre ambos se mantiene meramente en un plano amistoso, en el que el narrador percibe con esta mujer una camaradería que le proporciona seguridad y estabilidad. Este hecho le lleva a buscar reiteradamente la compañía de la misma, para hablar, beber té, comer comida turca y escuchar música de Sezen Aksu:
“Aber viel wichtiger erschien mir, daβ Filiz möglicherweise verstand, was ich fühlte. Für einen kurzen Moment glaubte ich, daβ es nicht um diese Nacht ging oder um irgendeine andere, sondern darum, daβ wir diesselben Namen für die Gefühle kannten. All diese verschiedenen Worte für die verschiedenen Arten von Liebe, Melancholie, Sehnsucht, Leid und Haβ. Wir konnten uns vielleicht tatsächlich erzählen, wie wir uns fühlten, einander wirklich verstehen. Sie konnte mich vielleicht erlösen.“ (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p. 105)
Sin embargo, se advierte nuevamente que el narrador utiliza a la mujer, ya que él, como narrador omnisciente, tiene conocimiento de la existencia de dos mujeres, en tanto que ellas, por el contrario, son desconocedoras de la existencia respectiva de la otra y, por tanto, engañadas. Filiz, además, es doblemente engañada, pues, por un lado, cree que la relación se basa en el amor y, por otro, no se la ha consultado, si quiere implicarse con un hombre ya comprometido. Es utilizada, ya que el yo narrativo logra, finalmente, su objetivo: llevársela a la cama:
“…, ihr Mund schmeckte herrlich, er versprach soviet, das war ja noch keine Liebe, das war die verzehrende Sehnsucht, die erfüllt werden konnte.“(Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p.135)
Si se compara este pasaje, en el que el propio Ian reconoce la atracción sexual dejando de lado el amor, con el fragmento en el que éste le confiesa que tiene novia y que no quiere dejarla, se descubre cómo ella se siente traicionada:
“- Du hast mich die ganze Zeit also nur verarscht.
[...]Und jetzt, wo du mich gefickt hast, hast du genug, ja? Das hätte ich nicht gedacht. Ich dachte, du wärst anders, ich dachte, in dich könnte ich mich verlieben, du wärst nicht so ein Schwein. Du bist genauso wie die anderen.“ (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p.182)
Conviene destacar este texto por resumir el engaño de Ian en palabras de Filiz, que siente que ha sido utilizada a la par que devuelve al yo narrativo su reflejo en el espejo: no es diferente; es como todos los demás.
Resumiendo, los personajes femeninos personifican la necesidad que el yo narrativo tiene de un ámbito que le proporcione estabilidad a la vez que reflejan la verdadera imagen de éste: pese al afán manifiesto de éste por ser diferente y actuar acorde a unos principios por los que ni ofende ni hace daño a nadie, sin embargo, no es capaz de atenerse a ellos y engaña a dos mujeres, hiriendo los sentimientos de ambas.
El planteamiento del idioma
A continuación se estudia la lengua que S. Özdogan emplea en esta novelña, ya sea a nivel temático como formal.
Vaya por delante que ya se ha expresado anteriormente, en el punto titulado ‘Identidades en constante búsqueda’, que este creador gusta de retratar a sus protagonistas como personajes que reivindican su condición de escritor. En esta obra, concretamente, el personaje ficticio que refiere el relato es autor literario, lo que permite al novelista reflexionar sobre la repercusión de su obra.
En consecuencia, la lengua de esta novela aparece en diferentes planos que, a su vez, confluyen entre sí. De este modo, se distingue, por un lado, un plano temático y, por otro, uno formal, que presentan al mismo tiempo una subdivisión que en el plano temático puede determinarse como sigue: la obra del autor como objeto de evaluación crítica por parte de los entendidos o pseudo-entendidos y las reiteradas alusiones que el yo narrativo hace a su condición de escritor.
En el plano formal se diferencian, a su vez: el recurso por medio del que bien incluye palabras y frases turcas, bien palabras y frases inglesas en el texto y la predisposición a yuxtaponer frases y expresiones separadas meramente por comas.
El autor plasma un fragmento en el que el yo narrativo es testigo de una conversación sobre literatura donde se aprecia la discrepancia que hay entre las tendencias de determinados autores jóvenes y las expectativas por parte del público. Mientras que estos autores en general – y el yo narrativo en particular – escriben por el mero hecho de escribir, con la única intención de provocar una reacción a nivel de sentimientos, cierta parte del público y de los estudiosos literarios, sin embargo, esperan que aborden temas que afectan a la sociedad, en un claro intento por convertir la literatura en reflejo de la realidad social e histórica circundante. Por consiguiente, critican a estos escritores reprochándoles falta de formación en la lectura de los autores clásicos y denunciándolos como exponentes de la decadencia de Occidente:
“Sie sprachen über Literatur, irgendwie verfolgte mich das, sie redeten von inhaltsleeren Unterhaltungsromanen, von nationalem kulturellem Erbe, von Bildung, von fehlbelesenen Abiturienten, das war eine Wortkombination, die mich fast schmunzeln lieβ, von der grotesken Ahnungslosigkeit meiner Generation, die sich durch Unkenntnis der Klassiker auszeichnete, der Niedergang der abendländischen Kultur, die jungen Leute kannten sich selbst nicht mehr, ihnen war nicht zu helfen, sie waren für Gott und die Welt verloren, da waren sie sich einig.“ (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p. 74)
Sin embargo, el yo narrativo, prototipo de la juventud desencantada de la política y sus representantes, se caracteriza por su egoísmo y narcisismo, y cuyo objetivo en esta vida es vivir el momento. No quiere salvar el mundo, ni dar testimonio de los hechos históricos y sociales que le rodean. Por consiguiente, personifica a esa generación de jóvenes que escribe buscando despertar sentimientos y emociones en el lector:
“Es reichte nicht, wenn man einfach nur schrieb, weil man die Menschen berühren wollte.“8Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p.75)
En este sentido, es de destacar que el protagonista no pretende en ningún momento crear escuela, dado que no cree en la autoridad y, por consiguiente, no quiere ejercerla ni tener seguidores:
“Und ich, ich glaubte nicht an Autoritäten, ich gehörte nicht zu denen, die eine Lehre zu verbreiten hatten, sondern versuchte zu erklären, daβ die Schule aus ist.” (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p.75)
Por otra parte, se observa – tal y como ya se ha analizado en el apartado del tema de la identidad - la recurrente mención de la profesión de escritor. De este modo, el narrador omnisciente, además de reflexionar y plantearse su identidad en particular, afirma asimismo un conocimiento de la lengua alemana como materna. Consecuentemente, su competencia lingüística es tal que le distingue personalmente como individuo integrado y además le diferencia del resto del colectivo inmigrante por un lado y de la propia población alemana por otra, ya que es capaz de utilizar la lengua como instrumento de creación:
“Wie stehts mit der Nationalität? Würdest du dich als Deutschtürken bezeichnen, als türkischstämmigen Deutschen oder ...?
Fick dich ins Knie, ich schreibe Bücher.“ (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch,p. 72)
Conviene hacer referencia a la declaración última (¡Jódete, escribo libros!), en la que el protagonista deja constancia, por un lado, de su condición de escritor y, por otro, de su competencia lingüística, a la par que pone en evidencia al interlocutor que le pregunta por su adscripción nacional. Ésta es secundaria, lo que importa es que es autor literario y que escribe en alemán.
A propósito del plano formal de la lengua ya se ha dicho antes que Selim Özdogan incluye algunas palabras y frases en turco, en un intento de dar mayor realismo a la transcripción de conversaciones entre turcos en Alemania. Así, se advierte que estos giros turcos dotan al relato de una mayor agilidad y transmiten la sensación de leer una conversación real. Asimismo, se comprueba por la brevedad de los fragmentos que no importa el desconocimiento de la lengua turca, pues el contexto permite al lector inferir el significado de los mismos:
“- Bahnfahren, Abi, Celal Abi. Wie gehts, was treibst du, wir haben uns ja ewig nicht mehr gesehen.
- Aach, idare ediyoruz işte, sagte er, irgendwie bleibt man halt am Leben.“ (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p. 70)
En otro lugar se advierte esta mezcla de turco-alemán:
“…, wenn ich ihre Beine betrachtete.
- іyi yolculuklar, sagte sie an der Tür, und grüβ mir das Meer.” (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p.137)
Del mismo modo que entremezcla palabras y frases turcas junto con alemanas en el relato, también inserta en el texto términos ingleses. A diferencia de las palabras turcas que sirven para dotar de mayor plasticidad el relato, la reseña de palabras inglesas viene por norma general acompañada de la descripción de estados de ánimos del autor. En este sentido, se advierte que las palabras inglesas se corresponden frecuentemente con letras de canciones:
“No government is a way of life, no government is to trust your friends, sang Nicolette gerade, doch davon waren wir alle noch Lichtjahre entfernt.” (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p.p. 35)
En este fragmento se observa que el autor acude a la letra de una canción para expresar una opinión. De forma parecida ocurre en:
“We can get by if we want now, get fat piece of the pie, if we want, hörte ich die Stimme aus den Boxen rappen, ich würde schon klarkommen, irgendwie kam man immer klar.” (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p. 30)
Este tipo de textos permite interpretar la pertenencia del autor a una sociedad multicultural en la que la mezcla de lenguas es cada vez más frecuente, tornándose hecho cotidiano, y de ahí que lo refleje en su obra, aunque sea de forma tímida.
En cuanto a la sintaxis de esta novela, ya se ha aludido anteriormente a la tendencia que este autor muestra de aliterar frases separadas meramente por comas. De esta manera, retrata el desasosiego y la intranquilidad de su personaje por medio de la lengua. La separación por comas produce un efecto de interrupción, subrayando la falta de ligazón de los elementos de la oración entre sí:
“Und in solchen Läden gab man sein Geld aus, weil man sonst keine Ablenkung hatte, weil man vom Zwang beherrscht wurde, heute schon aus dem Gefängnis des nächsten Tages auszubrechen.“(Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p.35)
Se observa la aliteración de dos oraciones subordinadas causales introducidas por la conjunción ‘weil’. Mediante este recurso el autor refleja la lengua hablada, por un lado, y, por otro, introduce un elemento de desazón en el discurso.
De forma parecida ocurre en este otro pasaje:
“Vielleicht war es früher einfacher gewesen, ich hatte ein wenig getrunken, mir ein wenig die Leute angesehen, getanzt, Connected, Regulate, Five Man Army, Cellular Phone, es hatte immer ein paar Stücke gegeben, die mir reichten zum Glücklichsein, wenn ich nur ein wenig Platz hatte, um mich zu bewegen.“ (Özdogan, Selim (2000): Mehr. Roman. Berlin: Aufbau Taschenbuch, p.35)
Se advierte la presencia de una oración compuesta que puede dividirse en varias oraciones principales yuxtapuestas, una subordinada de relativo, otra condicional y una final de infinitivo. El ensamblaje de todas estas oraciones provoca una lectura en staccato que evoca las palpitaciones producidas por el nerviosismo del yo narrativo. En este sentido, el novelista utiliza la lengua, por una parte, para subrayar el título de la obra, Mehr, siendo de este modo exponente del deseo de su protagonista de vivir más rápido y más intensamente y, por otra, reproduce la forma de hablar de muchos jóvenes rapeadores.
En conclusión, Selim Özdogan utiliza la lengua en esta novela tanto a nivel temático como formal para dar testimonio de la multiculturalidad, mezclando voces de diferentes idiomas y calcando al alemán el modo de hablar de ciertos jóvenes estadounidenses, los cantantes de rap.